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| La Soldadera, Archivo Casasola. |
La Revolución Mexicana fue parte fundamental para la fotografía en México y vino a cambiar la faz del país como nos los dice Jhon Mraz en sus textos.
La fotografía ya no solo era de estudio, ahora se esparcía hacia lugares y eventos no planeados. Extranjeros venían al país a fotografiar la guerra que se estaba viviendo en ese momento, que fue noticia en todo el mundo y que por falta de censura le permitía el acceso a todas las personas.
Las fotografías de la revolución no solo sirvieron para ilustrar cientos de periódicos y revistas, también para hacer postales que se comercializaban tanto dentro como fuera del país. Considero que esto fue bastante ingenioso y que como siempre el mexicano saca provecho de sus victorias como de su derrotas.
Los caudillos se volvieron egolatras y entendían la necesidad de tomarse fotografías para que se diera a conocer las causas del movimiento, pero al mismo tiempo la vanidad los alcanzó, ellos mismos posaban ya para las fotos queriendo que sus hazañas fueran recordadas por el resto de la historia y ¿advinen que? ¡Lo lograron!
Ahora bien en cuanto al mito sobre que los hermanos Casasola estaban en toda la República sacando fotografías del combate, lo que deduzco es que también fueron bastante ingeniosos para que en un futuro se les reconociera principalmente a Agustín Victor Casasola como "El fotógrafo de la Revolución". Este personaeje, amante de la fotografía logro recopilar un archivo que hasta nuestros días es apreciado por todo el mundo.
Muchas de las fotografías que contiene el archivo Casasola son de fotografos comprometidos cpn las diferentes fuerzas, pero que fueron compradas por los hermanos.
Agustin Victor hizo muchas cosas que beneficio en cierta parte al país, pues en 1912 fundó la Agencia Mexicana de Información Gráfica, donde acumulaba imagenes de muchas fuentes y logro el reconocimiento para los fotoperiodistas. En 1988 el PRI se encargó de elogiarlo con un libro.
Se construyó una identidad en l país con el archivo Casasola, sin embargo tal vez no fue la manera correcta de hacerlo, pues se le quitó el crédito a muchos de los fotógrafos de época, para solo quedar como líderes a los hermanos Casasola.
